La Comunidad de Madrid ha declarado Bien de Interés Cultural (BIC) el monumento ecuestre al Rey Felipe III, en la Plaza Mayor de Madrid.
Se trata de una de las piezas más importantes y significativas de la estatuaria monumental manierista y es la más antigua de las conservadas fuera de Italia, ha informado este martes el consejero de Presidencia y Justicia, Ángel Garrido, en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
La Comunidad de Madrid ha querido declarar BIC el monumento para aclarar con ello su situación legal pues, pese a estar en el espacio de la plaza declarada BIC en 1985, no aparece descrito en el texto de la declaración del conjunto de edificios.
Además, el Gobierno regional pretende así vincular de un modo definitivo esta obra al espacio de la plaza, dándole consideración de inmueble y dotándole de un entorno de protección específico.
HISTORIA DE LA ESCULTURA DE FELIPE III
La escultura ecuestre en bronce del rey Felipe III de España fue realizada por Giambolgna y Pietro Tacca y su primera ubicación fueron los jardines del Alcázar de Madrid. En 1617 pasó al jardín Reservado de la Casa de Campo y desde 1847, a petición del cronista de la Villa y concejal del Ayuntamiento de Madrid Ramón de Mesonero Romanos, preside la Plaza Mayor de Madrid.
El pedestal en que descansa la talla es obra del arquitecto Juan José Sánchez Pescador, autor de las Casas del Cordero de la Puerta del Sol, con trabajo escultórico de Sabino de Medina, y data de 1849.
En abril de 1931, tras la proclamación de la Segunda República, el monumento sufrió un atentado que le produjo serios desperfectos. En 1970, la escultura y su pedestal fueron desmontados para realizar las obras del aparcamiento subterráneo de la Plaza Mayor; y desde 1971 está instalada en su ubicación actual.