Muchas veces cuando queremos salir fuera de España y pensamos en ciudades importantes y conocidas para visitar sin darnos cuenta de que hay otras zonas que igual no son tan famosas pero que albergan joyas turísticas inigualables.
Este es el caso del Tirol, ahora que se acerca el verano y si buscas un lugar para relajarte entre la naturaleza es sin duda la mejor opción. Esta región alpina ocupa territorios de Austria (Tirol Norte y Oriental) y de Italia (Tirol del Sur y Trentino).
Todos y cada uno de los pueblos y las ciudades que componen el Tirol merecen ser visitados. Pero es cierto que cabe destacar en concreto una ciudad que alberga uno de los paisajes más bellos de todos los Alpes.
En este caso hablamos de Innsbruck, que en alemán significa puente que se alza sobre el río Inn. Pertenece a la zona del Tirol austriaco y es la capital del estado que lleva ese nombre. Sus verdes paisajes, sus casas de colores y su variada fauna y flora componen muchas de las fotografías que se publican de los Alpes. Recibe turismo durante todo el año, ya que en invierno cuenta con uno de los mejores sistemas de pistas de esquí de toda Europa y en verano la oferta de deportes al aire libre, naturaleza y lagos es muy amplia. Esta zona alpina no sólo cuenta con monumentos naturales y paisajes, ya que son muchos los castillos que se alzan en sus empinadas laderas y sus inmensos valles.
En cuanto a la gastronomía, dicen que el codillo que aquí se come es el mejor de todos los territorios germanos; pero claro para ello habría que probarlos así que ese es otro atractivo más. El buen comer siempre es de agradecer.