Hablar de Panenka no es hablar de un ‘Sport Café’ cualquiera. En este restaurante, ‘restaurante’ con todas las letras, la prioridad es la calidad de la comida. Pero vayamos por partes.
La primera impresión no puede ser más sorprendente. Para los más futboleros (y apasionados de los deportes en general), entrar en Panenka es como entrar en un templo del balompié. El mural frente a la puerta, con ilustraciones de algunos de los mejores jugadores de la historia; el cartel de ‘punto de encuentro’, que nos indica a cuántos kilómetros nos encontramos de los principales estadios de fútbol (es, sin lugar a dudas, el elemento más fotografiado del restaurante, la estrella de los ‘selfies’); las televisiones de gran tamaño por todo el local; y por supuesto, el gran salón con una inmensa pantalla y tres televisiones contiguas en las que se puede disfrutar de cualquier evento deportivo como si estuvieras en el cine.
Pero como decíamos, Panenka no es solo esto. Si prefieres evitar ese ambiente tan deportivo podrás disfrutar de una tranquila terraza en la zona de Azca apartada del ruido de los coches.
Hablemos ahora de lo verdaderamente importante: la comida. No sirve de nada ir a un local especial si lo que te sirven es mediocre. En Panenka, insistimos, la comida es la prioridad.
Debido a la gran variedad de platos en la carta nos atreveremos a hacer una serie de sugerencias. Destacaremos cuatro platos por encima del resto, aunque para gustos, colores. Éstos son:
– Bocadillo de Calamares: Es, probablemente, el ‘bocata’ de calamares más original de Madrid. Y se dice pronto… No te esperes el típico bocadillo de la Plaza Mayor (sin menospreciarlo, que son parte de la esencia de la capital). Pero en Panenka han ido más allá y han reinventado la fórmula con un pan de tinta acompañado de salsa alioli rebajada con pera. ¡Espectacular!
– Mini hamburguesas de rabo de toro: La carne más sabrosa y con ese sabor a estofado que le diferencia del resto de hamburguesas. Vienen dos por ración.
– Los huevos Panenka: ¡La cazuela de la perdición! Huevos rotos con patatas, jamón, boletus y foie.
– Tempura de verduras: Acompañada de huevo trufado. Tiene un sabor más suave y menos ‘aceitoso’ que en la gran mayoría de restaurantes.
Para finalizar, si aún tienes ganas de postre, las tres alternativas (todas caseras) son buena opción, pero puestos a recomendar, no pierdas la ocasión de probar la crema de queso.
Panenka es un concepto diferente a todo lo que ofrece Madrid. Una gran opción para disfrutar de la tranquilidad de agosto en la capital.
Ubicación: Calle de Orense, 6
Precio: consulta la carta