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ENTRANTE: QUESO PROVOLONE AL HORNO
La mejor manera de dar comienzo a una romántica velada es presentarla con el queso provolone al horno. Para cualquier amante del queso, este plato es una auténtica delicia, una maravilla muy fácil de preparar y es también una manera para que, aquellos que no saben cocinar, tengan éxito y consigan hacer que sus seres queridos disfruten.
Es imprescindible elaborar el queso provolone en cuanto el invitado o invitada lleguen a casa, ya que solo mantendrá su sabor cuando se saca del horno. Es algo imprescindible para que el plato no pierda sus propiedades.
Se necesitan exclusivamente cuatro ingredientes para su elaboración:
▪ Rodaja de queso provolone
▪ Dos cucharadas de tomate confitado o en salsa
▪ Especias: albahaca, orégano, tomillo, etc.
▪ Aceite de oliva
Fuente de imagen: tripadvisor.es
Una vez se tienen listos los ingredientes, es hora de ponerse manos a la obra. En primer lugar, será necesario precalentar el horno a una temperatura de 200 grados. A continuación, en un molde apto para el horno –se recomienda que sea del tamaño de la rodaja de queso-, se colocarán un par de cucharadas de tomate confitado o en salsa en el fondo del recipiente.
Una vez depositado el tomate, se pone por encima la rodaja de queso en la que se añadirán las especias escogidas al gusto del anfitrión. Una vez puesto en el horno, habrá que esperar 15 minutos para que esté listo y pueda servirse. Podrá acompañarse con pan tostado.
PLATO PRINCIPAL: BERENJENAS RELLENAS DE CARNE
Al igual que el queso provolone al horno, las berenjenas no son muy difíciles de cocinar pero puede ser perfectamente el plato estrella de la noche. Sí que lleva más trabajo elaborarlas porque es necesario tener listos el relleno de carne y la bechamel, pero el resultado es más que magnífico.
Los ingredientes necesarios para su elaboración son los siguientes:
▪ Dos berenjenas grandes
▪ Queso rallado.
▪ Carne picada (elaboración):
500 gr. De carne picada
Un pimiento verde
Un vaso pequeño de vino blanco
Sal
Pimienta negra
Ajo
Aceite de oliva
▪ Bechamel:
Leche
Tres cucharadas de harina
Sal
Nuez moscada
Aceite de oliva
Fuente de imagen:valkicocina.com
Una vez que se disponga de los ingredientes, se lava con agua las berenjenas y se coloca también el líquido en abundancia en la cacerola acompañado de la sal. En el momento en el que se esté cociendo, se dispondrán las berenjenas partidas en dos y sin rabo. Habrá que dejar que se preparen hasta que se encuentren blandas. En ese momento se sacarán de la cacerola y se escurrirán.
En una sartén se echará un chorro de aceite con el fuego listo donde se prepara la carne picada. Para elaborarla se coloca cebolla cortada junto al ajo y después se añadirán los trozos de pimiento verde. Cuando esté preparado, se echará sobre la carne y se añadirá la sal. Una vez mezclados todos los ingredientes, se añadirá el vasito de vino blanco para darle sabor.
A continuación, se prepara la bechamel echando un chorro de aceite y al calentarse se colocará la harina. Cuando la harina obtenga un color más o menos tostado, se añadirá un poco de leche, se remueve hasta obtener la salsa que deseas.
Una vez preparadas la carne y la salsa, se mezclarán y se colocarán dentro de la berenjena, sin que traspase la piel de esta. Por encima de la piel de la berenjena, colocas también bechamel, queso rallado, se coloca en el horno y ¡voilà! El plato estará listo para disfrutarlo.
PIRULETAS DE CHOCOLATE
Para clausurar la velada lo ideal son las piruletas de chocolate, muy fáciles de elaborar y podrán decorarse al gusto de cada uno ya que cada piruleta puede estar hecha de maneras dispares.
Elmundoabocados.com
Los ingredientes necesarios son:
▪ Chocolate Negro
▪ Chocolate Banco
▪ Filigranas de colores
▪ Palillos
Para comenzar, será necesario derretir los diferentes chocolates de los que se dispone por separado. Se colocará el líquido en una bandeja plana y se protegerá con papel de horno.
Una vez hecho, se colocarán los palillos y se echará con una cuchara un poco de chocolate en la punta. Encima de cada piruleta se colocará nuevamente una lámina de papel de horno.
A continuación, se colocarán las piruletas en la nevera durante 30 minutos, una vez sacadas, se podrá ver que se despegan fácilmente y que ya están listas.