La Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid han llegado a un acuerdo para retrasar las obras en la línea 1 de Metro que finalmente comenzarán a mediados de junio y no a finales de mayo, como estaba previsto, y para que sea la EMT quien preste el servicio alternativo de autobuses mientras duren las obras.
En rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha relatado que han llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid, con el que se reunirán este miércoles.
En virtud de este acuerdo, y a petición del Ayuntamiento, la obra se «va a retrasar un poco», de manera que «en vez de iniciarse a finales de mayo» comenzarán a mediados o finales de junio. Será sobre el 18 de junio, y tendrán una duración de 133 días. La EMT se encargará de la prestación del servicio de autobuses, pero lo pagará Metro.
Cifuentes ha afirmado que «las obras son necesarias, hay que hacerlas» y en verano el Metro se utiliza menos, y por tanto la incidencia y las molestias a los ciudadanos van a ser menores.
Líneas especiales previstas son tres: Cuatro Caminos-Plaza de Castilla para la zona norte de la capital, Sierra de Guadalupe-Atocha Renfe la sur, y una lanzadera exprés por la A3 Sierra de Guadalupe-Conde de Casal.
Paralelamente, la EMT reforzará el servicio, entre un 25 y un 35 por ciento, en cinco líneas convencionales que prestan servicio en los distritos de Puente de Vallecas y Villa de Vallecas. Entre esas rutas se encuentra la línea 37 (Puente de Vallecas-Cuatro Caminos) que sustituye el tramo central de la línea 1 de metro (Atocha-Cuatro Caminos) no cubierto por estos servicios especiales. La empresa municipal destinará entre 50 y 60 autobuses (según los horarios, los tipos de día y el mes) para cubrir estos refuerzos y las tres líneas especiales.