Si eres mujer, tienes más de 25 años y no estás casada, todos en China te verán como la chica que ha faltado el respeto a su familia y a la que la sociedad señalará con el dedo.
En el gigante asiático, el concepto de ‘mujer soltera’ tiene una concepción negativa para la sociedad, eclipsada por la importancia y prioridad del matrimonio para el sexo femenino. Para la cultura china, una mujer soltera no está completa.
Muchas de las ‘mujeres deshecho’ (sheng nu) han decidido vivir su soltería de manera libre, otras simplemente han decidido educarse y estudiar. Esto algo que los hombres chinos no parecen defender: Muchos no conciben ni aceptan la idea de casarse con una mujer más inteligente, con más preparación o mejor trabajo. Por ello, gran parte de estas inteligentes féminas permanecen en la casilla de ‘deshonra’.
En el mercado matrimonial de Shanghai, un espacio donde jóvenes sin pareja son expuestos cual mercancía a la espera de una ‘buena oferta’, los padres de ‘las mujeres sobrantes’ buscan a la desesperada un marido para contentar a los demás, como si fuera la última oportunidad.
Se sitúa en La Plaza del Pueblo, una de las plazas más transitadas de Shanghai donde los progenitores tratan de colocar a sus hijas repartiendo sus datos en formato ‘currículum’: Una foto, si tiene trabajo, coche, casa, cuánto gana al año e incluso las medidas de su cuerpo.
La firma de belleza SK-II, ha querido reflejar la realidad que viven estas mujeres con un documental llamado ‘Marriage Market Takeover’ (‘La rebelión del mercado matrimonial’). En él, los testimonios desgarradores de unos padres desesperados se contraponen con el deseo de sus hijas de vivir libres ( #ChangeDestiny es el hashtag con el que SK-II anima a la gente a difundir la realidad de estas mujeres ).
Pese a que la cultura matrimonial china tiene una gran importancia, actualmente son muchas las mujeres que huyen de estas tradiciones y que reniegan el tener que casarse por obligación.
Quieren formarse, decidir por ellas mismas y encontrar el amor sin tener que estar sometidas a nada ni a nadie.