MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
Un total de ocho vecinos redistribuidos en cinco viviendas del edificio del distrito de Chamberí donde se han derrumbado la pasarelas interiores permanecen aún confinados en sus casas a la espera de que los bomberos del Ayuntamiento de la capital instale un andamio provisional para desalojarlos de forma segura.
Según han explicado fuentes de Emergencias Madrid, los bomberos estiman que la estructura para permitir que los vecinos puedan salir de sus inmuebles durará unas tres horas.
Las mismas fuentes indican que los vecinos que residen en la parte interior del edificio casi con toda seguridad no podrán regresar a sus domicilios.
Por ello, el Samur Social se pondrá a disposición de aquellos que no tengan alternativas habitacionales para pernoctar esta noche. Además, Policía Municipal mantiene cortado el tramo de esta calle entre Viriato y Garcia Paredes para facilitar las tareas.
Cuatro pasarelas interiores que conectan con la escalera de un edificio ubicado en el número 26 de la calle Santísima Trinidad se han derrumbado este martes sin que se hayan producido heridos.
El inmueble de seis plantas (incluida el bajo), que no presenta ningún daño estructural, es de tipo corrala y tiene dos patios, uno interior y uno exterior con una sola esclarea que se encuentra en uno de los lados del edificio y que se accede a ellas por pasarelas.
Por motivos que se desconocen de momento, las pasarelas se han derrumbado una sobre desde la quinta planta hasta la primera como si fuera un «castillo de naipes», ha explicado a los medios de comunicación el oficial de guardia de bomberos del Ayuntamiento de Madrid, Álvaro Macías.
Macías ha señalado que los bomberos han procedido a una demolición parcial de una de las pasarelas que quedaba con seguridad, retirando el escombro generado en esta actuación, dado que el resto ha sido ya evacuado del edificio de cara a construir el andamio provisional con el que desalojar a los vecinos.
«El material del andamio está pedido y cuando esté vamos a empezar a montar», ha subrayado para destacar que los vecinos están «nerviosos» pero atendidos en todo momento por los bomberos, que les han tranquilizado.
A su vez, Macías ha insistido en que no hay riesgo de derrumbe porque el derrumbe atañe a un elemento auxiliar del edificio y la estructura central que sustenta las viviendas «no peligra».
Por otro lado, ha asegurado que los vecinos que residen en la parte delantera van a poder utilizar el edificio con las instalaciones en condiciones de seguridad mientras que los de la parte posterior «no podrán utilizar» sus viviendas hasta que no se reparen esas pasarelas.