El Ayuntamiento de Pozuelo ha dado el último gran paso necesario para iniciar las obras de soterramiento de la última glorieta de la M-503. El proyecto fue anunciado por la alcaldesa, Susana Pérez Quislant, durante el Debate sobre el estado del Municipio a finales del pasado mes de junio.
Finalmente se ha ratificado definitivamente el texto del convenio que firmarán en próximas fechas Pérez Quislant y el presidente de la Junta de Compensación de ARPO. Este hará posible el comienzo de las obras, para las que el Ayuntamiento tiene presupuestados más de 10 millones de euros.
El documento, que ya fue aprobado por la Comisión de Urbanismo, contó sólo con el apoyo de los miembros del Grupo Municipal Popular, mientras que el resto de grupos con representación municipal se abstuvieron.
UNA SOLUCIÓN PARA LOS PROBLEMAS DE MOVILIDAD
Se da respuesta así a un problema de movilidad que se sufre desde hace años, después de que se soterraran las otras dos rotondas de la carretera, dejando pendiente esta última. La glorieta conecta Pozuelo con Majadahonda, Boadilla y Madrid y que está ubicada muy cerca del Hospital Puerta de Hierro.
La infraestructura beneficiará a más de tres millones de personas residentes en las poblaciones existentes entre Madrid y Villanueva de la Cañada. El Consistorio sostiene que su construcción solucionará los atascos que se producen a diario y que colapsan una de las principales entradas a la ciudad
