El absentismo laboral derivado de la Incapacidad Temporal por Contingencias Comunes (ITCC) tuvo en 2017 un coste de 2.202 millones de euros en la Comunidad de Madrid, según los datos de la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT).
Desglosándolo, el gasto en términos de prestaciones económicas de la Seguridad Social fue de 1.005 millones de euros, un 9,34 por ciento más que en 2016, mientras que el coste directo que dichas bajas laborales representaron para las empresas fue de 1.197 millones de euros, un 8,10 por ciento más que el año anterior.
Así lo ha recogido la asociación en un comunicado, después de que su director gerente, Pedro Pablo Sanz Casado, lo expusiese en la última reunión de la Comisión de Asuntos Laborales de CEIM. Además, AMAT ha presentado en CEIM la herramienta online ha desarrollado para el cálculo del coste del absentismo laboral ligado a las Contingencias Comunes.
Esta herramienta online permite a las empresas calcular, con diferentes modos de precisión (básico, avanzado y específico), el coste del absentismo laboral derivado de ITCC en términos de prestaciones económicas, el coste directo a cargo de la empresa e incluso el coste de oportunidad.
ABSENTISMO LABORAL POR ITCC
El coste del absentismo laboral por ITCC en la Comunidad de Madrid equivaldría a 132.806 jornadas anuales de trabajo perdidas o, lo que es lo mismo, a que casi cinco de cada 100 trabajadores no acudieran a su puesto de trabajo ningún día del año en 2017.
Las principales patologías traumatológicas que motivan baja médica en la población protegida por las mutuas en la Comunidad de Madrid alternaciones de la espalda, trastornos de articulación o alteraciones columna vertebral.
Desde CEIM han señalado que estos datos son preocupantes:«El absentismo no justificado es una práctica antisocial que ataca la capacidad de las empresas de generar riqueza y empleo, pone en riesgo las cuentas de la Seguridad Social y configura un clima laboral nocivo, puesto que sobrecarga a los trabajadores que han de suplir a los ausentes», han manifestado.
Por ello, los empresarios madrileños solicitan un control más eficaz de las bajas por contingencias comunes, así como de su duración, tanto por parte de los Servicios Autonómicos de Salud como por el INSS. Para ello, consideran que «el papel de las mutuas podría ser fundamental».