Nuestras costumbres siempre acaban adaptándose a los tiempos que corren. Por eso, en la actualidad vemos belenes fabricados a partir de piezas de Lego o de Playmobil, marcas de juguetes que gozan todavía de una inmensa popularidad. Por la misma razón, en el siglo XVIII, empezó a popularizarse el Belén Napolitano, de influencia claramente italiana. El Museo de Historia de Madrid acoge cada jueves una exposición sobre el mismo, en el que se explica su origen y su importancia.
¿QUÉ ES UN BELÉN NAPOLITANO?
Este tipo de belén no solo incluye elementos del nacimiento de Jesús, sino que los complementa con la aparición de figuras propias de la sociedad italiana de entonces, que van desde la nobleza y la burguesía a las clases más populares. El belén expuesto en el museo incluye un total de cincuenta figuras.
Están son articuladas. Por lo tanto, pueden alterarse sus gestos y posturas, para lograr un mayor realismo. Su estética es muy llamativa, similar a la que podemos esperar de la ciudad de Nápoles. Y por una buena razón…
¿POR QUÉ SE POPULARIZÓ ESTE BELÉN?
Los círculos cortesanos de la España de la época ayudaron a difundir este tipo de belén, que adquirió una gran popularidad gracias a Carlos III. El monarca había sido rey de Nápoles, por lo que popularizó las barrocas figuras de esta ciudad.
Este belén, como todos, es hijo de su época. Supone una mezcla fascinante entre la tradición española y la modernidad extranjera del siglo XVIII, creando un híbrido interesante de contemplar y estudiar.
