El Coworking Puerta de la Sierra, en el municipio de Venturada, ha acogido hoy una jornada profesional a la que se ha convocado a todos los empresarios del turismo rural madrileño.
El encuentro ha sido organizado por el portal líder en turismo rural, EscapadaRural.com, y el Centro de Innovación Turística Villa San Roque (Sierra Norte de Madrid). El objetivo es analizar cuestiones tan importantes como la necesidad de generar flujos turísticos de la Capital a los destinos rurales de la Comunidad, así como la dificultad para conseguir más pernoctaciones entre los propios clientes madrileños.
Para abordar esta problemática, el evento ha contado con la participación de Mercè Prieto, responsable de promoción turística de la Diputación de Barcelona, que ha asistido con el fin de compartir las estrategias emprendidas desde la Ciudad Condal para combatir estas mismas dificultades.
Asimismo, la jornada se ha centrado en el debate de la necesidad de evolucionar hacia la reserva online, un sistema que prefieren el 67% de los viajeros que visitan Madrid, pero que aún no está totalmente instaurado en el sector. De hecho, un 38% de los propietarios de alojamientos rurales indican disponer de una conexión deficiente a internet, lo cual sin duda repercute en la llamada brecha digital.
El evento se ha nutrido de otros contenidos, como los últimos datos del Observatorio del Turismo Rural sobre la Comunidad de Madrid y la presentación de nuevos proyectos turísticos en el destino. La agenda se ha completado con un taller de formación sobre Instagram para negocios rurales, donde con un espíritu muy práctico se han dado algunos consejos básicos sobre la utilización de la red más influyente del momento.
LOS PROBLEMAS PARA EL TURISMO RURAL
Según los datos del Observatorio del Turismo Rural, el madrileño es el cliente natural del turismo rural en la Comunidad y así lo señalan el 81% de los propietarios de alojamientos. Sin embargo, el viajero residente en esta región indica su preferencia por elegir destinos de las comunidades vecinas (91%) y entre sus preferencias destaca Castilla y León, seleccionada hasta en un 37% de las respuestas.
Según Elena Rubio, coordinadora del Centro de Innovación Turística Villa San Roque (Sierra Norte de Madrid), “este es un reto al que hay que enfrentarse creando una oferta lúdica que obligue al visitante a pernoctar. Para ello hay que conocer bien sus gustos y trabajar en equipo con el tejido empresarial del entorno, lo cual es precisamente el objetivo de nuestro Centro”.
Los clientes madrileños cuentan con un elevado porcentaje de heavy users, personas que practican turismo rural 4 veces al año y que interesa captar y fidelizar. Su perfil es principalmente familiar y buscan el relax y la desconexión, con propuestas de disfrute al aire libre, por encima de las culturales o gastronómicas. Su toma de decisiones a la hora de practicar turismo rural es, sobre todo, espontánea. Por ello, en palabras de Ana Alonso, directora de Comunicación de EscapadaRural.com “hay que tener una buena estrategia de promoción para seducirlo como una propuesta apetecible y accesible”.
LOS EMPRESARIOS Y NEGOCIOS EN DATOS
En cuanto a los empresarios, casi un 70% de los propietarios de un alojamiento rural dedican menos de 3 horas diarias a su negocio. Ello supone 10 puntos menos que la media española, por lo que se deduce un nivel de dedicación mínimo a esa actividad, con el consecuente impacto en la profesionalidad de dicha gestión. Por otro lado, la evolución de las políticas de precios sí han sido positivas, ya que en el último año hasta un 27% de ellos los han subido, superando en 5 puntos al resto del país.
Por último, el Observatorio ha revelado cómo un 41% reconoce necesitar ponerse al día respecto a los aspectos normativos que rigen su sector. En paralelo, aunque un 17% de los huéspedes del turismo rural madrileño desconoce si un alojamiento es legal o no al reservarlo, hasta un 11% de los propietarios reconoce que la oferta ilegal supone un riesgo para los clientes, porcentaje que supera en 4 puntos el índice de los propietarios españoles que consideran este peligro.
