No han tardado en sucederse las reacciones a la propuesta de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de suprimir el puente aéreo entre Madrid y la capital catalana como medida contra la emergencia climática.
La Confederación Empresarial de Madrid (Ceim) y Fomento del Trabajo Nacional han pedido este jueves «prudencia» ante la propuesta. En un comunicado conjunto con la patronal catalana, los empresarios madrileños alertan del riesgo de perjudicar a la actividad económica y al empleo si se limita la movilidad entre Madrid y Barcelona, lo cual afectaría a servicios aéreos «con mucha demanda» de pasajeros.
Los empresarios catalanes y madrileños opinan que ciudades cosmopolitas como Madrid y Barcelona deben disponer «de todas las conexiones posibles», tanto aéreas, marítimas, ferroviarias y viarias, dentro de un mecanismo de «libre competencia que garantiza el buen funcionamiento de estos servicios y también el precio».
Además, entienden las propuestas deben anunciarse «con los datos de los servicios y la demanda en función del volumen de pasajeros, el tráfico previsto y la capacidad real de cada servicio», ya que consideran que las propuestas deben de dar respuesta tanto a los criterios económicos como a los compromisos en la lucha contra el cambio climático.
Para Fomento del Trabajo y Ceim es «imprescindible» que Madrid y Barcelona cuenten con ese puente aéreo, ya que hay muchos vuelos de conexión entre las dos ciudades para enlazar con otros destinos, especialmente hacia Sudamérica, destacan.
Un «disparate»
Por su parte, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad de Madrid, Borja Carabante, ha calificado de «disparate» la propuesta de Colau.
«Prescindir de las comunicaciones aeropuertuarias es un absoluto disparate en la sociedad actual«, ha asegurado ante los periodistas el concejal del PP encargado de las políticas medioambientales en la capital.
El edil madrileño ha enmarcado esta propuesta en «anuncios y gestos a los que nos tienen muy acostumbrados la izquierda» que a su juicio «no tienen ninguna relevancia desde el punto de vista de la eficacia».
El ‘popular’ ha argumentado que las «necesidades en medio ambiente tiene que ser compatibles con las necesidades de desarrollo y de movilidad» y que «los países cuanto mejores comunicaciones tengan, más alternativas, son más socialmente justos territorialmente y tienen más desarrollo económico y social».
