El tema del «coladero» de Barajas no es nuevo. A comienzos de verano de 2020, la Comunidad de Madrid mostraba su preocupación por la posibilidad de que el aeropuerto de la capital se convirtiera en una puerta de entrada de casos importados de COVID-19.
Un año después, el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso pedirá al grupo parlamentario del PP que impulse tras la toma de posesión una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid sobre el tránsito en Barajas y su relación con la incidencia del coronavirus en la región, dada la «opacidad» del Gobierno en la información sobre los controles que se realizan a los viajeros.
En rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno en funciones, la presidenta madrileña en funciones, Isabel Díaz Ayuso, ha dicho que la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid ha registrado 731 casos sintomáticos que han llegado a la región a través del aeropuerto y 2.900 asintomáticos, y actualmente hay 24 pacientes en aislamiento en el Hotel Ayre Colón.
En esta línea, ha pedido que el Gobierno refuerce los controles e informe acerca de los pasajeros testados que entran por el aeropuerto, algo que, ha recordado, viene reclamando su Ejecutivo desde mayo de 2020 en los Consejos Interterritoriales de Salud.
«Con esa opacidad es muy difícil analizar la relación entre el aeropuerto y el trabajo que están realizando nuestros servicios públicos de la sanidad madrileña para ser más eficientes y, sobre todo, protegernos de cara al verano», ha sostenido la presidenta en funciones, que ha reclamado a Delegación del Gobierno y a todas las administraciones «trabajar en una misma dirección».
Ayuso ha añadido que su Gobierno quiere saber «qué protocolos se están poniendo en marcha para controlar la entrada de la covid-19, cuántos pasajeros están afectados, dónde van esos casos y tener más información porque ha habido una absoluta falta de transparencia».
Además, ha destacado la importancia de reforzar los controles en el aeropuerto de Barajas de cara al verano, ya que el aeródromo madrileño es «uno de los que tiene más tránsito del mundo», y «se deje de criminalizar a la sociedad madrileña y hablar de cañas, toros y borrachera».
