La ropa ecológica se ha convertido en un movimiento y en un estilo de vida que impulsa un consumo responsable. El objetivo es poder reducir lo máximo posible la huella humana en el planeta y no tener un impacto tan negativo en el medioambiente. Ya no se trata de reducir el consumo, se trata de cambiar el mundo de la moda y encontrar un equilibro. Crear un nuevo tipo de consumidor que sea responsable de sus actos. La industria textil es considerada como una de las fuentes más importantes de contaminación, por el proceso de creación y por los materiales que se usan.
Actualmente se está consolidando un movimiento que aúna un consumo responsable y garantiza que la moda pueda continuar con su camino hacia una tendencia mucho más sostenible. La ropa ecológica ha revolucionado el sector y cada vez son más las compañías que apuestan por crear una línea ecológica, impulsando prendas de calidad y consolidando líneas de estilo actuales. Así, es posible encontrar una gran oferta de ropa orgánica cada vez en más tiendas. Por lo que, las prendas ecológicas son mucho más accesibles para todos.
Cinco beneficios de usar ropa ecológica
Las denominadas prendas eco tienen una gran cantidad de beneficios tanto para el planeta como para el ser humano:
Medioambiente. Producir ropa significa contaminar grandes cantidades de agua. La mayoría de prendas necesitan mucha agua para ser fabricadas. Por ejemplo, un vaquero puede llegar a necesitar más de 2.000 litros de agua. Por otro lado, se suelen añadir químicos y colorantes en todas las prendas lo que provoca que en los campos de cultivo se produzca una gran contaminación. También puede tener un impacto en la salud de los trabajadores, al manipular estos productos y entrar en contacto con químicos y colorantes. Las prendas ecológicas están fabricadas a partir de materiales naturales y no cuentan con ningún aditivo químico.
Duración de cada prenda. Las prendas ecológicas duran mucho más tiempo y pueden usarse durante varios años sin que esto afecte a su calidad. Las prendas actuales duran tan solo unos meses, es cierto que tienen precios más bajos, pero esto requiere comprar con regularidad nuevas prendas. Reducir el consumo y apostar por prendas ecológicas implica también ahorrar dinero, no tener que estar adquiriendo cada pocos meses más prendas por el deterioro de compras pasadas. Además, reduce la aparición de alergias en la piel, las fibras naturales consiguen que aparezcan muchas menos afecciones.
Exclusividad. Cada prenda es exclusiva, no se producen una gran cantidad de prendas, por lo que el producto se convierte en algo exclusivo. No se impulsa la fabricación en grandes cantidades, el objetivo es reducir todo lo posible el impacto humano.
Economía. Las prendas ecológicas, impulsan un comercio justo. La ropa ecológica está impulsada, sobre todo por pequeñas y medianas empresas, preocupados también por crear un empleo de calidad.
Reciclaje. Algunas marcas están impulsando a la sociedad a reutilizar los recursos que ya se tienen. Así, se crean prendas a partir de botellas y otros materiales. De esta manera, se consolida una conciencia de reducir la huella humana.
Las prendas ecológicas han llegado para quedarse y revolucionar el sector. Parece que el movimiento cada vez está ganando más fuerza.