El Ayuntamiento de Madrid no permitirá desarrollar la labor de taxista a aquellas personas que hayan sido condenadas por delitos de naturaleza sexual ni delitos contra la infancia, por lo que tendrán que acreditar, como parte de los requisitos para ejercer su actividad, la ausencia de este tipo de antecedentes.
Esta será una de las novedades que se incorporarán a la nueva Ordenanza del Taxi a través de las enmiendas de los grupos municipales, que presentaron un total de 51 propuestas de las que siete (tres del PSOE, tres de Vox y una de Más Madrid) han sido aprobadas en una comisión extraordinaria celebrada este miércoles.
Otro cambio es que se permitirá a los taxistas que lo deseen instalar un módulo luminoso con las siglas ‘SOS’ que podrán activar como aviso de socorro en caso de incidentes en el interior del vehículo. Además, se dispone que la persona que transmita una licencia de taxi no podrá volver a tener otra hasta transcurridos dos años.
Fuentes municipales indican que estas modificaciones, junto con otras «más de técnica jurídica», ayudarán «a alcanzar los objetivos de la ordenanza sin desvirtuar el espíritu de la norma».
Las asociaciones del taxi rechazan la mayoría de las enmiendas
En declaraciones a Efe, el concejal socialista Ignacio Benito ha lamentado que se haya rechazado la mayoría de las enmiendas, impidiendo mejorar «una ordenanza muy nociva para los intereses del taxi» y que, asegura, rechazan «todas las asociaciones» del sector.
El texto definitivo de la ordenanza ha quedado aprobado provisionalmente con el voto favorable del PP, Cs y Vox y el voto en contra de Más Madrid y el PSOE, de modo que se elevará al pleno para su aprobación.
Otros cambios en la nueva Ordenanza del Taxi
La Ordenanza del Taxi permitirá a los taxis 100 por cien eléctricos trabajar los siete días de la semana, en lugar de los cinco habituales, y establecerá un código de vestimenta para los taxistas: camisa o polo lisos sin estampado; pantalón largo o falda, ambos de vestir y oscuros; si fuera necesario, jersey, chaleco o chaqueta oscuros; y zapatos cerrados y oscuros.
Asimismo, se creará un modelo de ‘licencia por puntos: cada taxi empezará con ocho, que se verán reducidos por cada sanción firme en vía administrativa y, cuando se pierdan todos, la licencia quedará suspendida por un período de entre tres meses y seis meses, y al cumplir la sanción el taxista recuperará los ocho puntos.
La norma permitirá reducir a la mitad la flota de taxis en servicio ante «circunstancias excepcionales de caída de la demanda», como ha ocurrido durante la pandemia, y modificar el régimen de descansos para eliminar la obligación de prestar el servicio un mínimo de siete horas diarias.
Incorpora además nuevas formas de contratación previa mediante precio cerrado y trayectos compartidos y el establecimiento de tarifas fijas desde o hacia las zonas de bajas emisiones como Madrid Central.
En el ámbito de la sostenibilidad, al aprobarse la ordenanza, todos los nuevos vehículos que presten servicio de taxi deberán ser CERO emisiones o ECO, suprimiendo la excepción que hasta ahora se aplicaba a los Eurotaxi.