«Gracias principalmente al turismo las grandes ciudades se aproximan y sus habitantes progresan hacia una situación de vecindad común, igualitaria y recíproca, fundamentada en la simpatía y mutuo conocimiento». Con esas palabras, el añorado alcalde de Madrid Enrique Tierno Galván inauguraba, en enero de 1981, la primera edición de la Feria Internacional de Turismo. FITUR.
Actualmente es una de las citas más importantes del mundo para el sector turístico. Y lo cierto es que ya desde esa ocasión inicial apuntaba buenas maneras, con 1.500 expositores, 37 países y 3.000 visitantes profesionales. El Palacio de Cristal de la Casa de Campo era el primer escenario de FITUR y allí no faltó la presencia del rey Juan Carlos I, Presidente de Honor de la feria y que simbolizaba el apoyo de la Casa Real hacia esta iniciativa.
Esa primera edición contó asimismo con el apoyo de todo el sector, Administraciones, OMT, Mesa del Turismo, CEOE, etc. Durante esa década se producían acontecimientos como la constitución en 1980 del Consejo de Turismo de la CEOE y de la patronal de hoteleros Zontur; la creación en 1984 de Inprotur (en 1990 pasaría a denominarse Turespaña); y la declaración en 1988 del Camino de Santiago como «Primer Itinerario Cultural Europeo».
En 1990 España ocupaba ya el tercer lugar mundial por llegadas internacionales de turistas. Y FITUR había pasado de contar en 1981 con 1.500 empresas expositoras de 37 países y 3.000 visitantes profesionales a contabilizar en 1990 un total de 3.257 empresas de 134 países y 30.032 visitantes profesionales.
La década de los noventa, la consolidación de FITUR
Esos sobresalientes números supusieron también un cambio de paradigma. FITUR ya se había consolidado como un atractivo escaparate directo entre destinos turísticos y potenciales clientes; todo mediante una fórmula muy atractiva e ingeniosa para la época. La década de los noventa fue, por tanto, la de la expansión y especialización de FITUR, mientras el sector experimentaba su segundo boom turístico. 1992 fue un año clave, gracias a la celebración de los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla lo que situaba a España durante unos meses como centro mediático mundial. Ese fue el año elegido por la organización para trasladarse al recién inaugurado Parque Ferial Juan Carlos I, concretamente al nuevo recinto ferial de IFEMA.
En 1994 se creaba FITUR Activo, y en el 2000 se creó FITUR Congresos y se fallan los primeros premios FITUR Tribuna Jorge Vila Fradera. En esta misma década el sector registró hitos como el Tratado de Schengen, en 1995; en 1996 se incorporaron a la Universidad los Estudios Oficiales de Turismo; en 1998 España ocupaba el segundo lugar mundial como receptor de visitantes, con más de 40 millones de llegadas internacionales, y en 2000 se aprobó el Plan Integral de Calidad del Turismo Español (PICTE) y se constituyó el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE). En el año 2000 FITUR contó con 7.933 empresas expositoras de 170 países y 71.331 visitantes profesionales.
El siglo XXI y el nuevo concepto de turismo
Llegados al siglo XXI, FITUR sigue buscando nuevas maneras de evolucionar. Con esta dinámica y como respuesta ante la sectorización del turismo, en el año 2000 se estrena FITUR Congresos: el Salón de Viajes y Reuniones de Incentivos. Esto es un work shop que sirve como instrumento de comercialización para el llamado “mercado de reuniones”; es decir, un área dentro de la propia FITUR que está específicamente dedicada a las convenciones y a las reuniones de negocio.
Del mismo modo que FITUR Congresos, a lo largo de los años se han ido adhiriendo distintas áreas específicas. Así, hoy en día existen: FITUR Salud (2015), FITUR Shopping (2015), FITUR Gay LGBT (2011), FITUR Green (2010), FITUR Tech (2007), FITUR B2B, Inves Tour y FITUR Know-how & Export. Cada cual especializada en un sector estratégico; ya sea el tecnológico, el medio ambiente, la salud o las inversiones de negocio.
Un poco antes, en 2008 la crisis económica mundial afectó al mundo entero y por supuesto, al turismo. Como consecuencia, en 2009 FITUR (tras varios años de grandes cifras) su racha de crecimiento se estancaba. No duró mucho la crisis, ya que a partir de 2014 se dejaron atrás los números rojos y se daban pasos de gigante, con más de 120.000 profesionales y más de 9.000 empresas procedentes de 165 países.
Fue asimismo una época marcada por la transformación del sector, favorecida por la tecnología y con el foco puesto en la sostenibilidad. Un periodo en el que FITUR también avanza con firmeza en ámbitos como el B2B, y la creación, ya en 2018, del espacio B2B especializado en turismo de reuniones FITUR MICE; nuevas áreas de especialización, como LGBT, Salud, Know-How & Export, Festivales, y tecnología, en sus secciones Fiturtechy (Futuro, Sostenibilidad, Negocio, Destino) así como en las aplicaciones 5G para la creación del prototipo “Feria Aumentada” desarrollada por el primer laboratorio I+D.
En su vocación por integrar nuevos nichos de mercado FITUR siguió, sin dejar de lado su objetivo principal de internacionalización, inaugurando nuevas secciones como FITUR FESTIVALES y FITUR CINE, dedicadas a conectar la industria turística con la musical y la cinematográfica, respectivamente.
La recuperación tras la pandemia
Aunque luego se torciera a causa del maldito COVID-19, 2020 arrancaba con inmejorables noticias para FITUR. La 40 edición de la feria cerraba con cifras récord de visitas, por encima de las 255.000, de las que más de 150.000 fueron profesionales, un 5,16% más que en 2019. En esa edición estuvieron representados 165 países y, según cifras oficiales, tuvo un impacto económico para Madrid de unos 333 millones de euros.
Todo lo que sucedió a partir de entonces ya es por todos conocido, y la pandemia obligó a que en 2021 tuviera que trasladarse al mes de mayo. Eso sí, el primer mes del año sí sirvió para que obtuviera el título de «Acontecimiento de Excepcional Interés Público«, reconociendo su labor en favor de «la dinamización y recuperación del turismo». Al final, más de sesenta mil visitantes, entre profesionales y público general, acudieron a Fitur 2021, formando parte activa de una edición especial que pasó a la historia por haber sido pista de despegue necesaria para la reactivación del turismo nacional e internacional después del coronavirus.
FITUR 2022, el último hasta la fecha y celebrado de nuevo en enero, con los últimos coletazos de la pandemia aún presentes, cerró sus puertas con un total de 111.193 asistentes duplicando los del año anterior y dibujando un futuro, de nuevo esperanzador. El que se vislumbra de cara a esta 43ª edición, cuyos datos confirman un importante crecimiento, consiguiendo igualar las cifras de superficie de ocupación prepandemia de su año récord, 2020. Y, estamos seguros, el número final de visitantes irá de la mano.