Un total de 4.573 víctimas mortales por accidentes se registraron en la Comunidad de Madrid entre los años 2011 y 2015, según el estudio Atlas de la accidentalidad en España. Accidentes, mortalidad y lesiones, de la Fundación Mapfre.
Según informa Mapfre, la región madrileña es la comunidad autónoma con menor índice medio anual de incidencia de la mortalidad por accidente por millón de habitantes, con 143.
Entre las principales causas de estos fallecimientos se encuentran las caídas (1.245), los ahogamientos (1.061), accidentes de tráfico (755), envenenamientos (295) e incendios (41). Destacan, además, un total de 1.038 muertes accidentales ocurridas en la Comunidad de Madrid, que se agrupan dentro del epígrafe Otros debido a que tienen un origen variado e indeterminado.
Asimismo, el informe muestra que un total de 176.185 madrileños durante este periodo han sufrido alguna lesión, como fracturas (112.807), lesiones intracraneales de tórax, abdomen y médula espinal (15.874) y luxaciones, esguinces y torceduras (15.686). Estas cifras también sitúan a la región entre las comunidades con menor tasa anual media de incidencia de morbilidad (5.505,8).
Respecto a los datos nacionales, cada año fallecen en España en torno a 400.000 personas. La mayoría de estas muertes, 389.600, se producen por causas naturales debido al deterioro físico de las personas con edades avanzadas. El resto, unas 10.495, se deben a causas accidentales.
Entre 2011 y 2015 se han registrado en nuestro país un total de 52.475 víctimas mortales, de las que cerca del 60 por ciento son hombres. La principal causa de muerte accidental conocida son las caídas, con 12.723 fallecidos (24,3 por ciento), que sufren principalmente mayores de 65 años y que entre 2011 y 2015 se han incrementado del 20 al 25 por ciento. Los ahogamientos y obstrucciones de las vías respiratorias es la segunda causa, con 11.707 fallecidos (22,3 por ciento).
También destacan los accidentes de tráfico y transporte, con 10.806 fallecidos (20,6 por ciento), siniestros que se producen en todas las edades; los envenenamientos, con 4.221 fallecidos (8 por ciento), que ocurren esencialmente por sobredosis de productos estimulantes, drogas o medicamentos entre los 25 y 50 años; y los incendios, que en estos cinco años acumulan un total de 826 fallecidos (1,6 por ciento).
Además, en el estudio también se incluyen las agresiones, que en dicho periodo entre los años 2011 y 2015 se han cobrado la vida de 1.554 personas (3 por ciento).
El informe señala, además, que en España, el índice anual medio de incidencia de la mortalidad por accidente es de 225,2 fallecidos por millón de habitantes, lo que equivale a 1 muerto por accidente por cada 4.440 ciudadanos, una realidad que, a juicio de Fundación Mapfre, «puede llegar a empeorar en los próximos años si no se reducen los niveles de seguridad existentes y si no se adoptan las medidas preventivas adecuadas».
El director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación Mapfre, Jesús Monclús, indica que una de las «mejores soluciones» para eliminar las fuentes de peligro, reducir la probabilidad de ocurrencia de accidentes y minimizar los daños personales directos es «poner en marcha planes estratégicos de prevención de accidentes que contribuyan a la formación, información y sensibilización de la sociedad y que estén liderados por la administración pública, en colaboración con instituciones civiles, sociales y privadas».