Llega el fin de semana y, una de las cosas que más nos apetece es la de disfrutar, por fin, de alimentos saludables después de habernos pasado de lunes a viernes comiendo deprisa y corriendo. En definitiva, “comer sano”.
Y precisamente esa es una de las máximas de Frutas Prohibidas, un Juice Bar que abrió sus puertas en Madrid en el año 2016 y que defiende el cada vez más extendido (y con razón) “somos lo que comemos”.
Pero la propuesta de este acogedor rincón de Chueca es un poco diferente, centrándose sobre todo en los zumos, elaborados en directo y con productos frescos (las mejores frutas y verduras), lo que significa un sabor que nada procesado nos puede ofrecer.
En este sentido, en la carta de zumos o smoothies de Frutas Prohibidas encontramos cosas tan apetecibles como el “Mojito Relax” (manzana, lima y hierbabuena), la “bomba” détox “Liberación” (Manzana, limón, jengibre y espirulina), el “Pecado Original” (açaí, fresa, frambuesa, arándano, mora, naranja y manzana) o el “Abel”, pensado especialmente para deportistas incorporando ingredientes llenos de proteínas como kale, aguacate, piña, leche de avena, sirope de agave y guisante.
Pero además de beber también podemos comer, y la oferta se completa con entrepanes de masa madre (inspirados en recetas de los cinco continentes), dulces caseros, Superfood Bowls (un menú completo pero elaborado con fruta, verduras, yogur…), infusiones, bebidas de té y por supuesto la deliciosa fruta de temporada en su estado natural. Y aquí también tendrás ocasión de seleccionar “superalimentos” como la chía para incorporar a tu plato.
Frutas Prohibidas se está convirtiendo asimismo en uno de los lugares de referencia de nuestra ciudad en lo que a café se refiere, con una carta de esta bebida basada en distintos granos según la temporada, cosechados en su punto óptimo en sus lugares de origen y tostados en Madrid.
Un planazo para cargarte de vitaminas de cara a esta primavera tardía.
Cuándo: Lunes a domingo, de 9:00 a 22:00
Dónde: Calle Libertad, 37; Metro Chueca
Precio: Aproximadamente siete euros por persona
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