Ya no hará falta comprar postales o tirar de fotos de recurso para tener una imagen de los rincones del interior del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.
Patrimonio Nacional ha anunciado que permitirá a los visitantes realizar fotografías en el lugar desde el primer día de diciembre, siguiendo el camino de una medida que está ya vigente en la Galería de las Colecciones Reales desde su apertura, el 28 de junio.
Ana de la Cueva, presidenta de Patrimonio Nacional, explica que «se trata de una evolución natural. Antes hacer fotografías era mucho más aparatoso e interfería en las visitas turísticas».
«Ahora, en recorridos como los de El Escorial, amplios y cómodos, no creemos que vaya a suponer un problema que alguien saque su móvil y haga una foto. Al contrario: muy posiblemente incentivará la visita de gente joven y multiplicará la difusión”, contimúa.
La institución no descarta ampliar la medida progresivamente a otros espacios, en función del balance que se haga de esta experiencia.
Acercarse al público joven
Tal y como se apuntaba, la actualización de la normativa de visita equipara estos espacios a la mayor parte de museos del mundo y busca acercarse a las generaciones más jóvenes, acostumbradas a compartir la realidad a través de sus móviles. En los dos últimos años, Patrimonio Nacional ha apostado por la difusión cultural en redes sociales como Instagram, X, Facebook o TikTok y la estrategia se ha visto respaldada por un aumento de seguidores e interacciones, lo que ha supuesto un aumento de visibilidad de la institución, tanto de sus espacios como de los actos oficiales y culturales que organiza.
La toma de fotografías se permitirá sin utilizar flash, trípode o cualquier otro elemento de estabilización, para garantizar la conservación de las obras de arte, la seguridad del resto de turistas y la fluidez de la visita, y el uso de esas imágenes será exclusivamente para fines privados.
De hecho, Patrimonio Nacional ha subrayado que cualquier utilización de fotografías tomadas en los Reales Sitios y el resto de los espacios gestionados por el organismo público con fines comerciales continuará necesitando autorización específica.
