Actualmente, aunque es una cifra aproximada ya que no todos están adscritos a una comunidad, hay unos 45 mil judíos en España, de los que aproximadamente diez mil residen en la Comunidad de Madrid.
La mayoría son familias procedentes del antiguo protectorado español en Marruecos, pero a raíz de las crisis políticas y económicas en varios países latinoamericanos, este número aumentó con la llegada de judíos procedentes de esos países, sobre todo de Argentina o Venezuela.
Todos ellos, igual que millones de personas en todo el mundo, se vieron sobrecogidos por los ataques de Hamas en Israel hace un mes, que dejaron centenares de asesinados y el comienzo de un nuevo conflicto en la zona que se recrudece cada vez más.
Hemos tratado de analizar cómo se ve esta guerra desde España por parte de esta comunidad de la mano de María Royo, Directora de Comunicación de la Federación de Comunidades Judías de España, la institución que representa oficialmente a las comunidades judías en España y que promueve y defiende la imagen del judaísmo en España, además de liderar la lucha contra el antisemitismo y la intolerancia a través del Observatorio de Antisemitismo.
Sin embargo, como es de imaginar, tanto el día a día de María como de todo este colectivo en Madrid han cambiado drásticamente desde los mencionados atentados del siete de octubre, ya que su seguridad, incluso a miles de kilómetros de Jerusalén, se ha visto alterada. «Nuestra rutina ha variado. Las sinagogas y centros comunitarios tienen mayor vigilancia y sobre todo nuestros corazones están gravemente dañados por el enorme impacto que ha supuesto las atrocidades cometidas por los terroristas de Hamás contra israelíes y no israelíes en el sur el país», nos cuenta Royo.
Aún a día de hoy no encuentra explicación para los salvajes actos que nos han conducido a la situación de guerra en la que estamos hoy. De hecho, cree que ante la pregunta de cómo hemos llegado a este punto, hay que remitírsela «a quienes han cometido las masacres». «No se entiende cómo seres humanos son capaces de semejantes salvajadas que ni los animales cometen«, abunda.
Lo que sí tiene claro es que no fue fruto de una escaramuza más, sino que era algo que se venía gestando en el tiempo y que «estaba sumamente planificado, hasta el más mínimo detalle». «Sabían muy bien lo que iban a hacer, eran conscientes«, asevera la Directora de Comunicación la Federación de Comunidades Judías de España.
«Israel se ha visto obligada a combatir en una guerra que no quería»
La actualidad en la zona muta cada día, por lo que es difícil hacer previsiones a corto plazo. Y, desde luego, tampoco es posible saber lo que sucederá de aquí a unos meses. Lo que sí, tiene claro María Royo es que «lo que está pasando en esta ocasión no lo hemos visto nunca» y que, ahora, «Israel se ha visto obligada a combatir en una guerra que no quería y que no buscaba«.
Por eso, ante una situación en la que considera que el Estado hebreo «se está enfrentando a un grupo terrorista que ha dejado claro de lo que es capaz» cree que uno de los siguientes pasos debería ser la implicación de otros países enviando refuerzos «en su compromiso por combatir el terrorismo».
Por otro lado, aunque no es ajena a todas las dificultades y giros que se producen en una región ya de por sí muy inestable, y siendo consciente de que es «imposible aventurar cuánto tiempo va a durar esta situación de guerra ni cómo va a terminar», sí que cree que esta vez podría ser el principio del fin de Hamas. «Lo que hemos visto en otras ocasiones es que Israel golpea duro a Hamas pero no es definitivo, por lo que con el tiempo, el grupo se rearma, se refuerza y vuelve a matar. Parece que esta vez el país no está dispuesto a que se repita la atrocidad que ha sucedido y eso pasa por la eliminación total de los terroristas y sus sofisticados arsenales militares», advierte.
«La paz llegará cuando los árabes amen a sus hijos más de lo que nos odian a nosotros»
Pero, detrás de las bombas y los fusiles, siempre hay personas que sufren, y el objetivo general, no solo aquí sino en cualquier situación, debe ser la paz. No será fácil, eso sí, ya que Royo cree que la única manera de alcanzarla es «que los palestinos tengan unos dirigentes que realmente busquen la paz y prosperidad para su gente, que busquen la convivencia y la conciliación entre ellos y con sus vecinos israelíes». En este sentido, Royo cita a la histórica ex primera ministra de Israel Golda Meir y su frase de que «la paz llegará cuando los árabes amen a sus hijos más de lo que nos odian a nosotros«.
Antes de terminar volvemos a España en general y a Madrid en particular, donde el posicionamiento en el conflicto, al menos mediáticamente hablando, está muy polarizado. Algo que no pasa desapercibido para María Royo, quien recuerda que, hasta el año 1967 cuando estalla la guerra de los Seis Días, «la opinión pública estaba del lado de Israel, al que percibían como un país joven, emprendedor, rodeado de enemigos con convicciones socialistas representadas por los kibbutz».
Todo cambió, sin embargo, con la fulminante victoria que consiguieron en esa guerra contra Egipto, Jordania, Siria y Líbano, momento a partir del cual se les empezó a ver «como una fuerza militar que recuperó territorio y, por tanto, las simpatías cambiaron hacia la causa palestina». Desde ese hito, considera, «nos encontramos con que hay bastantes opiniones partidarias de Israel, pero también las hay en contra». Y sobre estos últimos, lo tiene muy claro: «los que se proclaman pro palestinos, en realidad, son anti israelíes«.
Como hemos venido avanzando no será un conflicto que se resolverá hoy, ni mañana. Quizá nunca. Pero nunca hay que perder la esperanza y, como última cuestión, le preguntamos qué pediría a los líderes mundiales si estos le escucharan y pudiera decidir el siguiente paso. Y aquí también lo tiene claro. «Que se unieran a Israel para formar una coalición internacional que erradicara el terrorismo«.
Imagen portada: Agencia EFE
El conflicto no es de ahora ni Israel es inocente. Ver territorio dado por la ONU en 1947 y lo que tienen ahora. El terrorismo es un efecto vayan a la causa. No pueden borrar el ahogamiento continuado en el tiempo del espacio palestino. Palestina es la víctima de esa estrategia de ocupación de su espacio. Existiría Hamas si hubieran respetado a sus vecinos? Contesten si pueden esa pregunta.
Me puedes poner las etiquetas que quieras, pero tu no vas a definirme como antiisraelí, o piensa lo que te de la gana, pero yo sé que no lo soy. Si sé que lo estáis haciendo es un genocidio, y eso no tiene paliativos.
La Comunidad Internacional solo podrá involucrarse en el conflicto de una manera justa cuando israelíes y palestinos admitan las fronteras acordadas en 1948, y comprueben que las dos partes actúan según ese compromiso. Creo que lo mismo puede decirse de la opinion publica, al menos entenderá que hay esperanzas de solución.