La candidata de Ciudadanos (Cs) a la Alcaldía de Madrid, Begoña Villacís, ha aseverado esta mañana de forma rotunda que «no gobernará» con la aspirante del PP a presidir el Consistorio madrileño, Esperanza Aguirre.  

Así lo ha manifestado en un encuentro digital en El País, en el que un internauta le pide que sea clara y le insta a pronunciarse sobre si gobernará con la presidenta del PP de Madrid en vistas a que podría ser la llave para formar un nuevo Gobierno municipal.

«No, no gobernaré con Aguirre», ha espetado, mientras que en respuesta a otra pregunta ha apuntado que ella nunca ha hablado de pactos de Gobierno, sino de «líneas rojas y de acuerdos, con todas las formaciones, por reformas».

Si llega a la Alcaldía, Villacís se quedaría en el Palacio de Cibeles, algo que Aguirre no hará, ya que «sentiría cómoda no haciendo gastarse al madrileño otros 500 millones de euros en otra costosísima mudanza sólo por parecer ahorradora».

«Si, te reconozco que me incomoda profundamente un despacho de 80 metros, yo necesito un entorno sin paredes donde trabajemos todos codo con codo, y donde recibir a los vecinos, a los que dedicaremos, comprometido por programa, un mínimo de 4 horas semanales», ha señalado.

SU VISIÓN, A RAS DE CALLE

Otro internauta le ha preguntado cómo se puede presentar alguien a unas elecciones con tan poco recorrido político, a lo que Villacís le ha replicado que ella ofrece la visión de «la ciudad a ras de calle, o ras de metro, y no desde un coche oficial», algo que «te ofrece una perspectiva privilegiada, es la perspectiva que ha obviado el gobierno».

«Este tipo de planteamientos, pensar que personas que no vengamos de la política no deberíamos concurrir a elecciones, es un principio excesivamente proteccionista, proteccionista con el bipartidismo y, si me lo permite, un punto antidemocrático, ya que bajo esa premisa, el PSOE del 82 nunca hubiese tenido lugar, ni el CDS, ni otros muchos partidos», ha reseñado.

Además, ante la pregunta sobre por qué algunos temen al partido naranja, la aspirante madrileña ha recalcado que «no forman parte del coto exclusivo de reconocidos y reconocibles», ya que «entienden la política como un pastel que no quieren compartir, y advierten como una amenaza la pluralidad».

También una persona se interesa sobre su etapa como abogada y le pregunta qué le aporta la política que antes no te aportaba la abogacía. «No me ha dado tiempo a echar en falta nada, no tengo tiempo para ello. Probablemente echaré en falta la objetividad que, en la mayoría de los casos, te permite un juzgado», ha contestado.

«En un juzgado se acredita todo con argumentos y pruebas, en política todo vale. La política me ha permitido conocer todavía más realidades de Madrid, de las que ya anticipaba como abogada, defender derechos de una forma más efectiva, llegando a más gente. Entiendo que somos nosotros los que debemos aportar a la política, y las personas las que nos ayuden a ello», ha agregado.

Otro interesado le ha preguntado si Cs es un partido personalista, dado que en su pueblo los carteles con la cara de Albert Rivera tapan los del candidato local de Cs. «No, es un partido simplemente con un líder fuerte, no es un partido personalista, es un partido de personas, y, si me lo permite, con no muchos medios. Otros llevan 20 años en política y son, simplemente más conocidos, de nosotros se conoce nuestro proyecto, y eso no es algo malo sino todo lo contrario», ha agregado.