Aunque la integración de las personas con algún tipo de discapacidad es cada vez mayor, lo cierto es que aún quedan muchos pasos por dar en este sentido, incluido el que se refiere a su atención. Con el objetivo de mejorarlo, la Comunidad de Madrid ha anunciado un incremento en más del 25% su presupuesto para la atención a personas con discapacidad respecto al anterior ejercicio.
Así lo ha anunciado consejera de Familia, Juventud y Política Social, Concepción Dancausa, durante la reunión del Pleno del Consejo Asesor de Personas con Discapacidad, el primero que se celebra de manera presencial desde enero de 2019. Allí, Dancausa ha informado de que este aumento implica que, actualmente, la partida del Gobierno autonómico alcance los 410 millones de euros anuales.
Esta cantidad que ha permitido que la red pública de atención gratuita a personas adultas sume 130 nuevas plazas en residencias, 73 en Centros de Día, y 126 para personas con trastorno del espectro autista. En la Red de Atención Temprana a niños menores de 6 años, por su parte, se ha reforzado la asistencia con la puesta en marcha de 815 nuevas.
Una nueva Oficina de Atención a la Discapacidad
El Pleno también ha conocido la puesta en marcha de la Oficina de Atención a la Discapacidad, un órgano de carácter permanente y especializado, encargado de promover la igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad, garantizar la protección de sus derechos y avanzar en la reparación de cualquier situación de discriminación y exclusión social.
Cabe recordar que el Consejo Asesor de Personas con Discapacidad es un órgano colegiado, de carácter consultivo, que sirve de cauce para el conocimiento, estudio y posibles soluciones de los problemas que afectan a este colectivo. Está formado por 29 personas que representan a las tres administraciones, organizaciones empresariales, sindicales y asociaciones del Tercer Sector.
Por último, la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, definiendo toda una serie de actuaciones en materia de discapacidad y enfermedad mental que van a permitir la creación de unidades de convivencia, mejorar la accesibilidad, incorporar nuevas tecnologías de ocio, convertir habitaciones múltiples en individuales y avanzar en la comunicación digital de los usuarios.
Imagen portada: Comunidad de Madrid