Los alimentos que ingerimos pueden provocarnos felicidad y subirnos el ánimo. Un buen trozo de chocolate, helado o un granizado de limón pueden influirnos en nuestro estado de ánimo. Pero, también existen otros alimentos que además de cuidar tu día, influyen en el buen estado físico y psicológico.
Los vegetales. Las verduras de hoja verde como acelgas, espinacas o brócoli, son ricas en hierras, un mineral que equilibra las defensas y que, además, tiene un papel muy importante para disminuir el cansancio y evitar anemia.
Las almendras y avellanas son frutos secos muy ricos en magnesio. Este mineral contribuye a reducir los estados de fatiga y cansancio y mejora el funcionamiento normal de las funciones psicológicas. También puedes encontrar en alimentos como la quinoa y el arroz integral o los garbanzos y las acelgas.
Kiwi, pimientos y naranja. Son los tres alimentos más ricos en la famosa vitamina C. Esta vitamina interviene en unas funciones psicológicas correctas, reduce el cansancio y aumenta la absorción del hierro, además, contribuye a reforzar el sistema inmunitario por lo que ayuda a combatir gripes y resfriados.
Té matcha. De origen japonés, este té de color verde intenso que se comercializa en polvo y se disuelve directamente en agua, contiene numerosas vitaminas siendo una gran fuente de antioxidantes. Puedes tomarlo como sustituto del café, beneficiándote de un gran aporte de energía por la mañana. Además, contiene L-teanina, una sustancia que se considera un buen combustible para mejorar el rendimiento intelectual.
Huevo y pavo. Estos dos alimentos tienen un alto contenido en triptófano, un aminoácido que resuena siempre ligado a conceptos de dieta y bienestar. Esto es así, porque es un precursor de la serotonina, conocida como la hormona del bienestar, y que está implicada en regular funciones como el estado de ánimo o el deseo sexual.