Nuestra piel es un órgano que nos acompaña toda la vida y que se encuentra en el primer nivel de batalla, protegiéndonos y recibiendo todos los daños. A lo largo de los años, va sufriendo efectos y deterioro, tanto por la edad que la acompaña como por los conflictos a los que se ve expuesta. Por eso, es importante tenerla en cuenta, cuidarla y dejarla en manos de un buen especialista.
Existen diferentes motivos por los que debemos acudir al dermatólogo:
- Enfermedades cutáneas
- Envejecimiento de la piel y soluciones estéticas
De la primera, podemos hablar de problemas como eczemas, acné, psoriasis, alopecia, urticaria o dermatitis atópica entre las más comunes. De la segunda, el envejecimiento, encontramos problemas estéticos, pero también más conflictivos, como puede ser el debilitamiento de algunas zonas cutáneas. Además, pueden aparecer los comunes y molestos hongos para los que es necesario tratamiento.
¿Cómo elegir un buen dermatólogo?
Debemos tener en cuenta varios factores a la hora de visitar a un dermatólogo.
- Profesionalidad y experiencia
Por supuesto, es necesario ponernos en manos de especialistas cualificados. Para ello, podemos contar con institutos dermatológicos de categoría y con amplio recorrido. En Madrid podemos encontrar la clínica De Felipe Madrid, que cuentan con sede en Barcelona y en Londres, por lo que la experiencia e internacionalización es un buen aval.
No hay ningún inconveniente en acudir a una clínica y preguntar por las certificaciones del personal que va a atendernos. Así estaremos absolutamente seguros de que estamos en las manos adecuadas.
- Tratamientos especializados y de vanguardia
La ciencia y la medicina avanzan cada día, por eso es importante que el equipo médico cuente con los tratamientos adecuados y las últimas actualizaciones.
Hay multitud de tratamientos que pueden seguirse, incluso combinarlos para una mejor solución. Estos tratamientos van desde láser hasta congelación de la grasa adiposa, pasando por masajes, rellenos o cirugías.
Tener un buen especialista que estudie el caso y recomiende un tratamiento adaptado a las necesidades de cada paciente es de vital importancia. Ya que un problema que se denomina igual, no es lo mismo en ningún paciente.
- Precios
Es cierto que estamos hablando de salud y que, cuando de esto se trata, lo más importante es la recuperación. Sin embargo, saber que tenemos un tratamiento con un precio cerrado es una ventaja para no tener sorpresas. Además, es una marca de transparencia en la clínica.
- Primera impresión satisfactoria
Por supuesto, estamos hablando del ámbito humano y, como tal, se necesitan profesionales que se preocupen por el paciente y que tengan empatía, que nos den un trato adaptado a nuestras necesidades emocionales y que sepamos que podemos confiar en su buen hacer y su profesionalidad. Tener una buena atención desde el primer momento y encontrarnos seguros y con confianza es de lo más importante que una clínica que nos puede ofrecer, que la información sea detallada y que podamos estar seguros de que estamos en las manos adecuadas.
Es fácil darse cuenta de esta cualidad cuando visitamos un centro por primera vez. La diferencia entre frialdad y un trato humano es lo más sencillo de percibir para cualquiera que va en busca de una solución a un problema.