Charlamos con Verónica Pallini, actriz, docente e investigadora teatral, que actualmente dirige Porta4, espacio barcelonés dedicado a la producción y a la exhibición de artes escénicas, y que trae a la sala AzArte de Madrid Te voy a matar mamá, un texto del dramaturgo argentino Eduardo Rovner sobre los conflictos de la relación madre-hija.

Verónica Pallini investiga diferentes propuestas escénicas sometiendo el mismo texto, interpretado por ella misma, a diferentes directores. En esta ocasión la dirección corre a cargo de Francesc Amaro, quien ha subrayado los matices de la transformación psicológica del personaje, aun manteniendo esos elementos de humor, anécdotas y guiños que permiten al espectador identificarse y acompañar a Florencia en su plan para asesinar a su madre. Una dirección absolutamente actoral que más allá de lo estético transita por ese mundo interior, en ocasiones patológico, en el que se desarrollan los diálogos interiores que alimentan los vínculos afectivos.

Y es precisamente gracias a la interpretación de Verónica Pallini que se hace posible sacar a relucir la tesis de fondo del texto de Rovner con toda su crudeza. Cincuenta minutos de monólogo muy bien ejecutado que bien pueden resumirse en el pensamiento recurrente de su personaje: “Serás mujer y serás madre cuando estés sola”. Y un final sorprendente.

Te voy a matar mamá llega a la sala AZarte de Madrid con una nueva dirección y un giro en la visión de lo cómico. ¿El circuito off ha asentado un tipo de humor diferente?

Sí. Lo interesante del circuito off es que en general arriesga. Por eso a mí personalmente me interesa como creadora.

¿Por qué ese título tan directo y a la vez tan cotidiano?

Es de un autor argentino la obra, Eduardo Rovner. Él me contó que puso este nombre para expresar tanto el dramatismo como la ironía de la obra.

Como apunta el propio Eduardo Rovner, aunque desde la lógica pensamos que todo conflicto tiene que tener una solución, sin duda hay conflictos que son un motor en la vida.  De hecho, un tema recurrente en tus últimos trabajos, tanto de interpretación como de investigación, es el de la psicología de las relaciones personales.

Sí. La verdad es que me interesa el universo de los vínculos humanos más primarios. Parejas, relaciones familiares…. Creo que nos debemos otra formas de comunicación como sociedad…

¿Cuánto de hipocresía hay en las relaciones familiares?

Creo que hay mucho dolor en las familias por tener que responder a un deber ser y no nos enseñan a expresar el amor. Porque si hay conflicto es porque hay amor por eso duele tanto.

Pareciera que se vive más feliz en la indiferencia.

A mí me gusta la pasión, no me llevo bien con la indiferencia, en parte por eso me gusta indagar en los vínculos.

Como directora de Porta4, ¿nota que el público de teatro tiene ganas de comedia?

Sí. El público disfruta con la comedia. Entra más. Logra más empatía. De todas formas el público también disfruta del buen teatro en todos sus géneros, sin duda. El tema es que si arriesga a ver algo prefiere comedia.

El tono cómico permite hablar de cosas que de otro modo son difíciles de abordar. ¿Es posible dramatizar cualquier temática?

Yo creo que sí. Que podemos dramatizar toda temática porque la base esencial del teatro son las relaciones humanas.

Hay de un tiempo a esta parte un crecimiento exponencial de espacios teatrales, actividades, espectáculos, encuentros públicos de discusión… ¿Cuánto hay de resistencia cultural y cuánto de ocio?

Muy buena pregunta. Creo que de resistencia directa, consciente, hay poco. Tal vez tendríamos que trabajar más allí.

¿Qué se encuentra el público que acude a ver Te voy a matar mamá?

Un personaje con dolor que transita su vínculo con la madre y que lo hace con una ironía que empatiza con el espectador en varios momentos de la obra. Y nos hace reflexionar sobre qué es matar a los padres en un plano simbólico. O que es matar a un hijo.., para crecer internamente y para  encontrarnos entre hijos y padres desde un lugar más libre y amoroso

Te voy a matar mamá puede verse en la sala AzArte de Madrid (Calle San Marcos, 19, Tel. 915 22 67 68) los viernes de abril a las 18:30 horas.