La operación conjunta de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid y de la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional de Madrid contra la mafia china deja ya 50 detenidos, una cifra que podría aumentar, ya que la operación sigue abierta, ha informado este mediodía el subdelegado del Gobierno en Madrid, Luis Martínez-Sicluna.
Estas son las imágenes de los registros en #Madrid en una macro operación en la que participan más de 200 policías contra el #crimenorganizado. La operación sigue abierta. pic.twitter.com/baYHovhxpm
— Policía Nacional (@policia) 22 de mayo de 2018
De esta forma, los agentes han comenzado a practicar registros y detenciones en las provincias de Toledo, Ciudad Real y Madrid y dentro de ésta última especialmente en el distrito de Usera y del polígono industrial de Cobo Calleja (Fuenlabrada), donde vivían los líderes de la organización delictiva.
Así, se van a realizar un total de 42 registros y a los arrestados se les imputan delitos relativos a blanqueo de capitales, tráfico de drogas y de armas. Se trata, según ha destacado el subdelegado, de nuevas actividades de la denominada mafia china. Se está investigando también que estas bandas criminales también esté relacionada con la trata de seres humanos, la explotación sexual, falsificación y la extorsión.
La operación, llamada ‘Canito Alfa Brexit’ y en la que han participado más de 200 agentes, comenzó a finales de 2016 en la provincia de Ciudad Real, cuando la Guardia Civil de esa provincia detectó a un grupo chino que traficaba con drogas con los clanes de la zona. Desde entonces se han efectuado varias detenciones, pero la fase se explotación de la operación está teniendo lugar este martes, según han informado a Europa Press fuentes de la investigación.
La red comenzó distribuyendo marihuana, pasó a vender este tipo estupefacientes en Europa (sobre todo en Reino Unido e Italia) y también a distribuir drogas sintéticas y cocaína en locales de ocio españoles, especialmente en karaokes chinos. Luego se fue diversificando en otros delitos, como el negocio de las falsificaciones en Cobo Calleja y la prostitución ilegal.
