Dronestagram es una red social para compartir fotografías realizadas con drones. Como su nombre permite deducir, es el «Instagram para imágenes tomadas con drones». La comunidad permite a sus usuarios compartir fotografías y vídeos georeferenciados.
La plataforma fue lanzada en 2013 por Eric Dupin y es propiedad de su compañía Dronescape. Para formar parte de ella es necesario acceder desde su página web o desde la aplicación móvil disponible para iOS. De momento, la aplicación para Android se encuentra en desarrollo y solo puede encontrarse mediante la instalación aplicaciones no oficiales.
El número de usuarios crece de forma constante, en 2017 ya superaba los 35.000. Según la compañía, la mayoría de los usuarios son de Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Canadá y España. Se ha observado una relación directa entre los países con mayor nivel adquisitivo y los usuarios de la red social.
UNA PLATAFORMA EN DESARROLLO
La plataforma es fácil de usar, peor requiere de más esfuerzo que otras redes sociales. Para compartir una imagen basta con subirla, pero no cuenta con filtros como Instagram, además, las fotografías se organizan en función de su temática. Las imágenes que se comparten muestran una referencia geográfica y a través de la página web puede observarse un mapa con los lugares donde se han tomado las imágenes señalados.
Sin embargo, esta característica no está disponible en la app para móviles, sí que ofrece información acerca del autor, el tipo de dron y otras imágenes de lugares cercanos. Los videos tienen que subirse a Youtube o Vimeo para poder compartirse en la Dronestagram después.
Según el creador, la app pretende convertirse en un mapa del mundo a vista de pájaro con imágenes de lugares recónditos, inaccesibles o realmente imponentes del planeta. Además organiza concursos de fotografía divididos en varias categorías: naturaleza, personas o urbanas. En 2016, el concurso copatrocinado por National Geographic incluyó 5.900 participaciones de 28 países.