Si la noche de los martes de mayo en 8MadridTV pertenecían a Maribel Verdú, el rey de los lunes es José María Forqué. El director y padre de Verónica Forqué, fallecido en 1995 dejó un legado de cincuenta películas, muchas de las cuales fueron verdaderos éxitos en la década de los 50,60 y 70.
Su filmografía abarca casi todos los géneros, desde películas de denuncia social, pasando por thrillers, musicales y comedia, un campo en el, al igual que su hija, destacó especialmente.
Los lunes de Forqué comienza el día 10 con ‘Pecados conyugales’ una adaptación de la obra teatral de Juan José Alonso Millán en la que se relata la vida amorosa de tres parejas casadas desde la perspectiva de la falta de moral, los celos y la ambición. Enmarcada en pleno régimen franquista fue una película que obtuvo gran éxito en gran medida por lo revolucionario de su propuesta.
El ciclo continua el lunes 17 con ‘El Triangulito’, un largometraje que narra la relación imposible entre una chica de provincias, su jefe de personal de almacén de muebles en el que trabaja y un hiperactivo vendedor de camas. Una película en la que subyace una crítica al despliegue económico de la época y los inicios de las campañas de marketing agresivas. Interpretada por Fernando Fernán Gómez, Gerdad Barray y Dyanik Zurakowska, la comedia también aborda temas como la fe, la virilidad y el matrimonio.
El 24 le toca el turno a ‘La cera virgen’, en esta ocasión el director vuelve a dirigir a Carmen Sevilla, con la que trabajó en ‘El secreto de Mónica’. En una apuesta por la comedia musical con toques surrealistas, Forqué critica la discriminación femenina y la hipocresía de un señorito que se obsesiona con los encantos de una joven. El guion co-escrito con Rafael Azcona aporta una visión ácida del destape que se vivió en aquella época.
El broche de oro llega el lunes 31 con ‘El canto de la Cigarra’ una de las últimas películas del director, cuya actividad no fue tan prolífica durante los años 80. Se trata de una adaptación de la obra de Alfonso Paso, en la que trabajó junto a su hija Verónica. En ella retoma uno de los temas estrella de su filmografía, el matrimonio, está vez combinado con una critica al capitalismo dentro de un tono de comedia disparatada.
Forqué, cuyo talento se apagó hace ya 26 años, obtuvo el reconocimiento que merecía a una larga trayectoria con una Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, el Premio Nacional de Cinematografía y el Goya de honor en 1994, que le fue entregado de manos de su hija en una de sus últimas apariciones antes de fallecer el 17 de marzo del año siguiente.
