Moyà, Corretja, Bruguera, Nadal… Son nombres muy familiares para todos los amantes del tenis, que han llevado el nombre de España a todos los rincones del mundo gracias su manejo de la raqueta. Pero hubo uno, el pionero, sin el cuál, muy probablemente, este deporte no hubiera sido lo que es hoy en día en nuestro país.
Hablamos, por supuesto, de Manolo Santana, orgulloso madrileño que fue el primer compatriota en ganar un torneo del Grand Slam y que nos dejó este sábado a los 83 años de edad. En su palmarés figuraban, entre otros, dos torneos de Roland Garros (en 1961 y 1964), el US Open, en 1965 y el de Wimbledon, en 1966. En ese año, en el que reinó sobre el césped británico, llegó a ser el número 1 del mundo.
Ahora llega el momento de darle el último adiós, en uno de sus lugares favoritos, la Caja Mágica, sede del Mutua Madrid Open de tenis. Allí, hasta las 20.00 horas todas las personas que lo deseen podrán ir a despedirse del tenista. Su féretro está cubierto por una bandera de España, rodeado de numerosas coronas de flores de admiradores del mundo del tenis como Rafa Nadal, Jon Tiriac o Ilie Nastase.
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, ha querido acompañar a los familiares del deportista en este difícil momento.
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