El Paticano, situado en pleno barrio de Lavapiés, es una capilla dedicada a la adoración de los patos de goma o de plástico de la Iglesia Patólica. Desde su inauguración el 28 de diciembre del 2012 en Madrid, este lugar de culto celebra regularmente misas y acontecimientos como bodas y bautizos con su propia liturgia.
Todos los domingos en sus misas Patólicas, el gran bufón y cómico Leo Bassi, provoca carcajadas y aplausos de consensos con preguntas y reflexiones. El proyecto se corona así como un hito en la carrera teatral de Leo Bassi, un actor y cómico italiano que se quiere definir como bufón. Ha trabajado en numerosas representaciones teatrales, en películas y también ha participado en varios programas de televisión.
El objetivo de esta falsa iglesia es que el público se ría y se lo pase bien, no hay dogma, ya que toda visión de cualquier persona es bienvenida y agradecida, siempre y cuando aporte humor, risa y buen rollo al resto de fieles.
Así pues, la elección de un Dios tan improbable como es el caso del pato de goma de las bañeras, participa en este simbolismo de humor, burla y desconexión. La ironía provocadora con la que un objeto tan humilde tiñe el trono del todopoderoso tiene su contrapartida profundamente moral.
Las mismas son todos los domingos a la una de la tarde, la entrada es libre y gratuita aunque también se puede ir reservando previamente. De esta manera, también se pueden reservar auténticos bautismos, bodas divorcios de todo tipo cargados de humor, risas y auténtica locura. «El arte del payaso es sagrado y la risa tiene una función que conecta con la esencia del ser humano», explicó Bassi al periódico El Mundo.
Durante la misa convencional, se exhiben al público cinco películas cortas, de 30 segundos cada una del bisabuelo de Leo Bassi, Giorgio Bassi. Estos son documentos únicos y excepcionales filmados por los hermanos Lumière hace 119 años que muestran a los primeros Payasos de la historia. Se tratan de primicias absolutas ya que no han sido exhibidas ni emitidas en ningún medio con anterioridad.
El resto del tiempo viene cargado de discursos y reflexiones que hace el propio cura Bassi con un espíritu crítico, rebelde y creativo, cuyo fin es enseñar a la gente a ser más libre y tolerante.
Si necesitas desconectar de las trágicas noticias a las que nos encontramos bombardeados diariamente, la Iglesia Patólica te invita a entrar en su santuario y convertirte al Patolicismo en plena Travesía de la Primavera nº 3.
