MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
Las obras de reforma y mejora de varios colegios de Coslada, que se estaban realizando este verano, han concluido de cara al curso escolar que comienza la próxima semana, según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
En el CEIP Blas de Otero se ha realizado una inversión de 325.000 euros. En concreto, se ha instalado climatización con la sustitución de las válvulas termostáticas y de otros elementos de control y equipamiento de las redes de calefacción.
Del mismo modo, se ha renovado la red y los equipos en la instalación interior de varias dependencias como aulas, despachos, etc. También, se han instalado pérgolas de protección en los patios y se han repintado las estructuras y sustituido el material de cubrición.
En el CEIP Séneca en los próximos días terminarán los trabajos de reparación de cornisas. Y en la Escuela Infantil Diamela se ha producido la sustitución de la red de distribución de suministro interior de agua.
El alcalde de Coslada, Ángel Viveros, ha afirmado que «la reforma y mejora de los centros educativos del municipio es una de las prioridades». «Por ello, un año más hemos apostado por dedicar parte del presupuesto del mantenimiento de edificios públicos a realizar varias intervenciones en centros educativos con el objeto de mejorar su estado actual, su eficiencia energética o corregir deficiencias existentes y que docentes y alumnado puedan iniciar el curso en las mejores condiciones de espacio», ha añadido.
‘COSLADA JUEGA EN VERANO’ LLEGA A SU FIN
Por otro lado, el Gobierno local ha informado de que el programa de ocio educativo ‘Coslada Juega en Verano’ llega a su término esta semana. Casi 4.000 niños del municipio, entre los que había también personas con necesidades especiales, han participado en la actividad.
Coslada Juega en Verano 2018 ha ofertado un total de 3.990 plazas, destinando alrededor de un millar de ellas con servicio de acogida y comedor, cerca de 1.500 con servicio de comedor, y 1.575 para los pequeños que solo han asistido a la actividad. Se ha desarrollado a lo largo de diez semanas en los colegios Torres Quevedo, Menéndez Pidal, Blas de Otero, Alfredo Landa, El Olivo y Antoni Tàpies.
El objetivo es ofrecer a los menores un complemento lúdico y educativo con iniciativas que fomenten actitudes y valores sociales positivos como la solidaridad, el respeto, la cooperación y la convivencia.
Las actividades que se realizan el programa son deportivas, culturales y artísticas. Ha habido juegos de habilidad, de acción, de estrategia, cooperativos, de mesa, recreativos y de educación en valores. También se han desarrollado talleres creativos.
Todas las actividades se han ajustado al ritmo, capacidades e intereses del alumnado. Los participantes en el programa se han organizado en tres grupos de edad: de 3 a 5 años, de 6 a 9 años y de 10 a 12 años.